SESIONES LÚDICAS

Los artistas recurren a la exaltación y fascinación de los objetos, experimentando con las formas, materiales y texturas que permiten contextualizar las evocaciones a los espacios de juego; esos momentos de la infancia, espontáneos, donde se da inicio a nuestros pensamientos.

RECUERDO CON ELLA

Tallado en granito

La labor del ser humano está en discutir su propia supervivencia por naturaleza; el conflicto del artista es conseguir su pasión estética, para alimetar su espiritu.

El vacio es parte de mi historia, mi pensamiento y la incomprención del sueño atravez de la realidad, es la imaginación de saber comprender su forma sobre la expresión; cada linea significa una oración sobre la masa descrita o alterada, eso significa el lenguaje de mi espacio.

Basado en un recuerdo de la felicidad sobre aquel rostro, yo colectaba algunas sonrisas para disfrutar la inocencia, como aquel balancin de grafías homófanas sobre mi mente, quise otorgar un inmemoriable sentido de gratitud.

Valdemar con sus figuras en piedra estructurales, geométricas o abstractas; evocan sensaciones a la presión, a lo foráneo que nos trasforma, a la violencia con la que crecemos y vivimos del cotidiano, que se inserta en nuestro subconsciente.

TROMPO MISIO

Tallado en granito y Algarrobo

 El hombre ha experimentado distorsionar su diverción, con  juegos atravez del movimiento y el equilibrio hace muchos años; y dejo en el transcurrir huellas ideológicas.

el arte infantil contagia multitudes sin medir niveles, ni edad; porque se extiende en un trompo lo que ha escrito su historia; la alegria del placer que todo niño en su momento sabe disfrutar  de la moda lúdica; y hoy solo me queda consolar un recuerdo alegre de aquellos seis años.

                                                  El arte es alegria...

HONDA PORTATIL

Tallado en granito y madera

hoy quiero pasear en un nuevo coche, uno que pueda alzar, que pueda pasear con mi amigos, que nos haga sonreir y discutir; de esos que resulten fuertes como una roca, que no pueda destruir.

Un juguete para mi colección, uno con el que pueda recordar mi historia cultural,
Como aquellos incas cuando tiraron de las cordilleras con sus hondas
para hacer sentir el latido de la tierra, y porque no recordar aquella historia
cuando yo era niño. Hoy cautivo un reflejo en mi rostro, y se llama alegria de aquel
juguete que perdí cuando paseaba en mi barrio

Raquel Castro Carbonel

Historiadora  de Arte